lunes, febrero 4

El hombre misterioso

1. Ella, con ese flequillito hermoso y esa cara de pícara que me hace pensar en cosas muy malas. Me mira de reojo. Yo la miro como sin importarme unos segundos y desvío rapidamente mis ojos hacia la persona que está detrás de ella. Alguno podrá pensar que mi técnica de seducción es extraña, poco ortodoxa, pero la verdad es que es muy simple: no hay que perder el misterio, nunca. Ya va a haber tiempo para desilusionar a la gente, para que se den cuenta de que estas desesperado, pero para conquisar a una chica hay que mantener el misterio. Miro para otro lado, y hago que me río. Me sumo a una conversación. Jajaja, claro, claro boludo. Los chicos me miran extrañados. Se ríen de mi y siguen discutiendo. La vuelvo a mirar a ella. Ya no me mira. Me le acerco. Saludo a la amiga que está al lado de ella. Me quedo charlando, ignorándola un poquito, manteniendo el misterio. Tratarlas con indiferencia, esa es la otra clave. Como que no estas desesperado por ella. Como que no te enamoraste apenas la viste y te estas derritiendo de amor desde hace una hora. La amiga parece divertida con la charla. Ella no se que hace porque le estoy dando la espalda, pero tampoco participa. Se empieza a alejar. Pero confío mi estrategia, y ni siquiera la miro, un maestro del misterio.


2. La fiesta continúa. Sigo hablando con la amiga. Yo estoy implacable, se me ocurren los mejores chistes, las frases más inteligentes, la hago morir de risa. No para de hablarme. Me despido y la empiezo a buscar con la mirada. Ella está parada al lado de la barra, con cara de aburrida. Me mira nuevamente. De repente, el coraje me invade y decido actuar. Me acerco a la barra. Me pido una botella de vino. Me sirvo y comienzo a beber, a solo unos pasos de ella. Empiezo a pensar que debe estar pensando que soy un tipo raro. Entonces comienzo a conversar con el barman, que me da un aspecto de sociable y de bohemio a la vez. No la miro pero siento que me observa intrigada, pensará algo así como “ese hombre debe ser interesante”. Su amiga la viene a buscar. Agarra su cartera y se van. Sonrío. El misterio se mantuvo con altura. Misión cumplida.

8 comentarios:

César Ferri dijo...

Hola Bartolo!!!
Ante todo, muchas gracias por visitar mi blog, leer y dejar tu comentario.
Aquí estoy, en tu sitio, en una primera pasada viendo que resulta interesante leer lo que escribís.
Seguramente más adelante volveré a visitarte y, respecto a lo que contás sobre la chica del flequillo y el final de la historia, te digo que aquel pensamiento de que se fue con la amiga pensando de vos "debe ser un hombre interesante" es una muy buena justificación a que no te haya dado bola; tenés una destacable (y al menos en éste caso sana) tendencia a ver el vaso medio lleno.
Te dejo un abrazo y hasta la próxima!!!

Valeria dijo...

Interesante método de seducción.
Ella debe estar pensando que sos la reencarnación de Humprey Bogart, con un leve toque de James Bond (pero el Bond de Connery).

Saludos

Coca dijo...

Bartolo, me gusta Girondo y la verdad que no conocía ese poema. Está buenísimo. Me gustaría escribir así, pero lo cierto es que jamás saldría de esta cabecita una frase como: "la personalidad es una especie de forunculósis anímica en estado crónico de erupción", por ejemplo.
Saludos
Y sobre el post: Demasiado misterio Bartolo, sos cualquiera! Ese relato no tendría que terminar con vos levantándote al barman, todo mal. No es así Bartolo ... yo te digo nomás.

El Señor F. dijo...

El dandy de Cinzano, un poroto. No sé cómo terminé acá, pero muy buen blog. felicitaciones!

pd: espero que el método haya funcionado, sino sería una decepción notable.

un mero individuo dijo...

Me encantó este relato, pero no como si fuera un principe y lo convierten en sapo, es otro tipo de encanto de ese que decís yo tambien soy ese (algunos dicen empatía, pero a mi me suena a empanada rellena con la hermana de mi vieja)

Sweet carolain dijo...

jaj Que lindo modo de seducir, ademas aunque a veces no resulta,yo creo que es efectivo jaj saludos carolaina.

Conjuro dijo...

Las veces que habré pensado que dejando correr los minutos me convertiría en un ser más interesante y al final nadie lo advertía.

Rockfo dijo...

la clásica historia que se reproduce en nuestras cabezas al estar cerca de "Ella".

la naturaleza del hombre...

salu2